Señor, gracias por la paz, por la alegría verdadera, por las palabras positivas que me han dado el coraje de vivir bien mi vocación, por las personas que han dado mucha inspiración con el testimonio de su vida.
Señor, gracias por la amistad de muchas personas en mi comunidad, en mi parroquia, en las parroquias donde he conocido a otros amigos y amigas. Gracias también por la amistad con las personas en la Red: en Twitter, en Facebook, en el correo, y sobre todo en este Blog (www.llamadosmcs.blogspot.com) donde muchas personas nos escriben de sus experiencias maravillosas y con ellas ayudan a algunos visitantes a ir adelante en su vida.
Señor, muchas gracias sobre todo por la fe que me ha acompañado a lo largo de este año; por tu presencia en mi vida y en nuestra comunidad paulina.
Señor, muchas gracias sobre todo por la fe que me ha acompañado a lo largo de este año; por tu presencia en mi vida y en nuestra comunidad paulina.
Muchísimas gracias, Señor, por tu amor y por el regalo de la vida preciosa.
¡Feliz Año Nuevo a todos!